MARÍA SÁNEZ (Foto: Esteban Huamán) |
TU CANTO
(Para María Sánez, artista)
¿Un sonido puede ser miel?
Sí, creo que sí.
Pero, para no empalagar nunca.
Música, como rumor de aladas alegrías
que circundan en derredor
con la más dulce amenaza de estos días:
Traernos como mensaje y regalo
la felicidad que retorna
y ha de quedarse para alimentarnos
con pedacitos de pan y sonrisas,
en cena alborotada de niños que sueñan.
Sí, es miel.
Pero no cualquier sonido,
sino el que brota de un manantial
como agua fresca y clara;
o como lava, no incandescente, sino tibia
de un volcán que da vida y no destruye.
¿De dónde? De tus labios, que son
la puerta divina del cielo,
de ese cielo que llevas como bendición,
o atadito de monedas y buena fe,
o como flor de naranjo que da paz,
a donde quiera que vayas: diosa
que reparte buenas nuevas
y certezas, y no ilusiones.
Y eso, eso es la música que amo:
canto, poesía, esperanza.
Vida que renace
como flor de cactus o de retama
en retoño vigoroso y perpetuo.
Canto de almíbar y de polen.
Voz azucarada.
Miel de tábano.
Tu canto, pues.
El canto que es nuestro canto:
anuncio esplendoroso de los nuevos días
y de la libertad ya nunca más lastimada.
¡Canta, siempre canta,
Mayita!
Tu canto ha de ser néctar,
Siempre.
(7 de Julio, 2020)